viernes, 9 de noviembre de 2007

Iglesia Viva

Con motivo de la celebración de la V Conferencia General del Episcopado Latinoamericano y del Caribe, nuestra comunidad ha querido reunirse y presentar este trabajo como participación activa y viva. Integramos unas treinta (30) personas, que en sucesivas reuniones rotábamos en mas y menos, conforme sus posibilidades. Algunas llevaron la propuesta a sus comunidades más próximas.

Participamos empleados, profesionales, amas de casa, familias enteras, hijas e hijos, en rica comunión y con un ferviente deseo de servicio.

Debate y reunión ha enriquecido nuestra experiencia como Cristianos, así como el firme deseo de una Iglesia al servicio de todos, como hermanos, como hijos de Dios.

En el camino recorrido, apoyados en la documentación proporcionada y la riqueza de las fichas de trabajo resumimos:

  • Encontraremos la verdadera felicidad en la Santidad

  • El misionar del Cristiano debe darse en el accionar cotidiano, en los propios medios, principalmente con un testimonio de Amor y Perdón.

  • Vivir coherentemente nuestra fe, asumir toda la responsabilidad que nos cabe, en especial para con aquellos que mas nos cuesta y en particular con aquellos que dicen no creer.

  • Como actitud misionera de nuestro entorno mas cercano, “antojar de Dios” a los demás. Siempre con nuestro ejemplo, con la radicalidad que decimos creer.

  • Fortalecer y practicar la tolerancia, humildad y actitud de servicio.

  • Irradiar alegría de ser Cristiano, que se nos conozca y vea por el Amor que reflejemos.

  • Evangelizar desde la santidad, desde la Oración, la Eucaristía, la Reconciliación.

  • Participar de la Palabra, en su estudio, en su meditación. También como alimento.

  • Formarnos con una visión Cristiana en nuestros oficios, en nuestras profesiones.

  • Fomentar reuniones en nuestras comunidades, debidamente guiadas, en forma de seminarios, grupos de trabajo y formación, cursos en distintos niveles que permitan un crecimiento acorde con los tiempos y comunión en todo con nuestros pastores. De manera de hablar y vivir todos un mismo idioma y una misma santidad.

  • Requerir de nuestros pastores y para ser pastores, fomenten y estimulen nuestra participación y nuestra formación, para un misionar en todo conforme con el espíritu del conjunto.

  • Requerir de los pastores, nos guien y acompañen en nuestro encuentro con Cristo, y con Cristo en nuestros hermanos.

  • Promover y permitir la participación activa de los fieles en las labores pastorales como verdaderos protagonistas y no solo como espectadores pasivos.

  • Mayor participación en medios de comunicación masiva y utilización de recursos, acorde con los tiempos. Poner los medios de comunicación al servicio de una Nueva Evangelización.

  • Hacemos hincapié en la formación permanente de religiosos, sacerdotes y laicos. Un seguimiento que permita criterios homogeneos y un mensaje coherente en nuestras vidas, privadas y públicas, como una sola entidad.

  • Hacemos nuestra, la idea de una formación inicial básica, en encuentros comunitarios, retiros espirituales, participación activa en los sacramentos, ejercicios dinámicos de misión. Rereunir a los grupos e ir fortaleciendo la formación con guias adecuados. Siempre en la busqueda de una involucración dinámica de todas las partes.

  • Profundización de la formación permanente, conforme especifica el documento de participación en su anexo 2, contenidos y metodología

Queremos resumir con nuestros pastores, que hoy, Evangelizar es “Antojar de Dios” a nuestros hermanos, “antojar y enamorar”, a cercanos y no tan cercanos. Hoy, especialmente hoy, sin acepción de personas.

“7. Como testigo del amor de Cristo, el discípulo trabaja en la sociedad para que ella acoja a todos conforme a su dignidad de hijos de Dios y los aliente a hacer fecundos los dones que de Él recibió”

Documento de Participación, Anexo 3

Destacamos la importancia de las fichas de trabajo y la vigencia de sus contenidos, y nos gustaría recomendar como herramienta de formación permanente y unificadora de criterios y caminos.

Damos gracias a Dios por esta participación.

No hay comentarios: